No era ningún secreto que, tras terminar Demon's Souls y con la calentura todavía en el cuerpo, me iba a tirar de cabeza al ampliamente conocido Dark Souls. Realmente no sabía si era buena idea meterse dos Souls seguidos entre pecho y espalda, de hecho me habían recomendado meter algo entre uno y otro; pero como Demon's Souls me había dejado con ganas de más, me veía con fuerzas y me lo pedía el cuerpo, decidí que había que seguir los instintos y así lo hice. Es por ello, que tras haber superado Anor Londo, considero que es buen momento para dejaros por aquí mis primeras impresiones sobre el juego.